Hola ¿Quién eres? Preséntate con tus palabras, por favor.
Soy una piba que -de chica- le encantaba dibujar pero después creció, hizo una carrera universitaria, empezó a trabajar como docente en una escuela pública del conurbano y, una vez que llegó a ese punto de no-retorno, se dio cuenta de que la vida era más divertida mientras dibujaba… razón por la cual volvió a agarrar los lápices.
Muy bien, Lil ¿Pero estudiaste o sos autodidacta?
No, nunca estudié, desde chica siempre que veía un dibujo interesante automáticamente lo copiaba. Así que más que dibujante autodidacta soy una ‘copista profesional’, ja ja. Recién en los últimos años me animé a crear cosas por mi cuenta. [Desde fines de 2012 hasta mediados del 2013 asistí al taller de dibujo e historieta dictado por Claudio Ramírez. Aunque sigo cometiendo algunos errores, adquirí un poco más de soltura frente a la hoja en blanco.]
¿Cómo empezaste a aficionarte en las historietas?
Hace un par de años, cuando tenía 8 o 9 más o menos, mi viejo solía llegar a casa con alguna que otra historieta: Patoruzú, Isidoro Cañones, Condorito. Después descubrí a Mafalda y ya un poquito más grande (gracias a la influencia de Juanjo, mi mejor amigo) pude leer algunas cosas de Cazador, que me encantó. Por ende, al momento de terminar el secundario ya había leído algunos ‘clásicos’, pero no había avanzado más allá de eso.
Recién en el primer o segundo año en la UBA, por intermedio de un compañero de la carrera de Historia, empecé a ampliar mi panorama cuando descubrí el manga japonés: Evangelion. Y claro, ¡ahí fue como descubrir América! Junto con el descubrimiento del manga llegó también la lectura de grandes obras: El Eternauta, Mort Cinder, Sherlock Time, Corto Maltés, Ticonderoga… ahora que lo pienso, yo no sé si Clarín miente, ¡pero la colección de historietas que publicó fue un golazo! ja ja
Pasó el tiempo y, casi por casualidad, caí una tarde de sábado en un evento: Dibujados (en octubre del año pasado [2011])… si habría que ponerle una fecha al pleno inicio de mi idilio con las historietas, supongo que ese sería EL día entre los días.
¿Qué más podes contar de DIBUJADOS? ¿A quién conociste ahí? ¿Quién lo organizaba?
¿Qué temas te gustan en los libros e historietas?
En cuanto a los libros, me gustan distintos géneros, aunque por algún motivo que desconozco siempre termino sucumbiendo ante los autores anglosajones: desde las novelas de Jane Austen hasta las aventuras detectivescas magistralmente narradas por Sir Arthur Conan Doyle. Del otro lado del océano, no puedo negar que me fascina la prosa de Edgar A. Poe así como la narrativa de H. P. Lovecraft. Son autores cuyas obras podría releer decenas de veces…
Con las historietas es distinto, porque muchas veces me engancho a priori con la estética antes que con el tema, de modo tal que experimento mucho más que con los libros. Eso me permitió descubrir ciertos géneros a los que, habitualmente, no les prestaba tanta atención.
¿Cuál es tu aspiración? ¿Fama?
No lo sé, supongo que ante todo deseo dibujar para mí misma y en ese camino termino descubriendo que hay personas que disfrutan con lo que hago… pero la fama no se me cruza ni remotamente por la cabeza, primero porque no creo que tenga talento como para merecerla y, segundo, porque no me interesa…
Para darte un ejemplo, las primeras historietas que hice, más o menos en el año 2007, estaban relacionadas con cuestiones cotidianas de la facultad. Las había llamado cariñosamente Jardín Botánico, porque recreaban a distintos profesores y compañeros según como serían sus felinas mascotas. Imagínate mi sorpresa cuando Oriana, una gran amiga y compañera de cursada, no tiene mejor idea que hacer copias de la primera página y las reparte entre algunos de nuestros compañeros: yo no podía creer que les gustara y, menos que menos, que algunos me reconocieran por esos dibujos… ¡si eran viñetas que dibujaba al voleo mientras me aburría en clase! ja ja
Bueno, así empezó Matt Groening. Pero no creas que invito a dialogar a cualquiera. El motivo es porque cuando vi la carpeta con el proyecto de Zombies en Puán! me asombró la prolijidad del trazo y la esmerada dedicación. A mí conseguir eso me llevó años. Creo que uno siempre se puede perfeccionar, pero si tiene disciplina la cosa es más fácil ¿Cuánto tiempo te lleva hacer una página?
En el caso de Zombies en Puán! hacer una página me lleva algunas horas, dos como máximo. De hecho, ¿te acordas del gran apagón de Semana Santa? [abril de 2011]. Bueno, en ese entonces dibujé la primera página: a la luz de una vela, sin regla, sólo con fibra porque el trazo grueso contrastaba con el papel y eso me permitía dibujar mejor en la penumbra. Como me gustó el resultado final, adopté ese estilo deliberadamente veloz y desprolijo para las páginas siguientes.
¿Qué es lo que te hace juzgar si un cómic es bueno o malo?
El guión. Para mí, más allá de lo estético, una historia bien narrada resulta fundamental a la hora de evaluar un cómic.
¿Qué es la historieta para vos?
En tanto lectura, es un género literario sumamente notable: llamativo, dinámico, que oscila desde el humor más punzante hasta una profundidad desmedida…
Por otra parte, la historieta como momento en que me siento a dibujar es un espacio de relajación y dispersión. Es el momento en que sólo me concentro en el papel y los trazos y mando al diablo al resto de las cosas: aunque sean las 3 am de un día laboral, aunque debiera estar preparando planificaciones docentes, aunque pase 4 días consecutivos sin luz…
Contame más sobre tu trabajo de docente ¿Qué enseñas y a quienes?
Estudié en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, en agosto de 2009 obtuve el título de Profesora de Enseñanza Media y Superior en Historia. Actualmente me desempeño como docente en distintas E.S.B. [Escuela Secundaria Básica] públicas de la zona de Quilmes. Trabajo con alumnos de 1º y 2º año, tanto en el área de Historia como de Ciencias Sociales. Me gusta lo que hago, a pesar de que algunas veces ciertas situaciones conflictivas que se generan dentro y fuera del aula me terminan desbordando.
¿Crees que hay público para lo que haces?
Yo creo que sí, más que nada por el tipo de historias que dibujo. Cuando hacía Jardín Botánico tenía algunos amigos y compañeros que me alentaban y disfrutaban con esas historias, ahora que estoy con este proyecto nuevo las cosas (felizmente) no han cambiado.
Zombies en Puán! es un idea que nació de la mano de mi amigo Augusto [♥], quien escribe los guiones y hace los storyboards mientras yo me enchastro los dedos con fibra negra. Como su nombre lo indica es una historieta sobre zombies, aunque con la peculiaridad de que está ambientada en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. De modo tal que, con solo cuatro páginas en nuestro haber, hemos logrado captar la atención de algunos compañeros de cursada así como de gente amiga: los muchachos que laburan en la fotocopiadora El Arca, historietistas del under que nos hacen el aguante… capaz son 10 personas las que nos leen, pero está bueno saber que disfrutan con lo que hacemos. [La página de Z.E.P.! https://www.facebook.com/pages/Zombies-en-Puán/447518778613423 va creciendo día a día. De hecho, estamos en plena reedición de las 20 páginas originales de la historieta.]
Mirá, uno nunca sabe la cantidad de lectores y la verdad no es tan importante como parece. Creo que hay que hacer lo que uno cree, lo demás vendrá o no. En lo que sí soy muy insistente es la difusión. A veces un producto malo es leído por todos sólo por la difusión y algo bueno no lo conoce nadie porque nadie tiró ni un aviso. ¿Qué opinas sobre eso?
Sí, es posible que sea así. Hay varios factores que influyen: la disponibilidad de recursos para bancar una obra (ya sea por medios digitales, en papel, etc.), la constancia del autor para poder participar en la mayor cantidad de eventos posibles. Porque así como hay artistas muy macanudos con trabajos estupendos y buena predisposición, he visto publicaciones mediocres realizadas por gente no menos mediocre que encima te dice “ah no, nosotros no vamos a ese tipo de eventos…” ¡ni que fueran Bosse y Michetz dibujando la saga de Kogaratsu!
¿Qué opinas de los eventos de Historietas?
Hay tanta variedad de eventos como publicaciones disponibles. Mejor o peor organizados, aunque la mayoría son bastante amenos.
Obvio que hay cosas con las que no estoy de acuerdo, como los altos costos de algunos eventos: por ejemplo, en el Animate del año pasado [2011] la entrada costaba $25 y los precios de las publicaciones y merchandising no eran precisamente accesibles. Es una lástima que la difusión del género se vea sometida por el ánimo de lucro.
En mi caso prefiero los eventos de historietas independientes y fanzines (Dibujados, Cómic Stadium, Festival Increíble, Viñetas Impulsivas) o las reuniones ‘sectarias’ como las de los ‘legionarios’ de Cazador, donde me divierto muchísimo.
¿Tienes un e-zine favorito?
La verdad que no, pero por una cuestión de que no me gusta leer desde la pantalla, prefiero el formato tradicional en papel.
Sí, es incómodo, pero ya salieron unos aparatos que harán más amena la lectura digital y mal que mal, es lo que vendrá. ¿Hay algún autor contemporáneo que sigas?
Dentro del ámbito de las historietas, más que ‘uno’ diría ‘varios’. Desde Solano López (a quien admiraba profundamente y siempre llevaré en la memoria), pasando por tipos consagrados como Jorge Lucas y Claudio Ramírez hasta llegar a El Bruno…
¿Cuál es tu autor favorito?
Aunque no sea una pregunta sencilla de responder, sin dudas es Francisco Solano López.
¿Llegaste a conocerlo en persona?
No, lamentablemente no pude conocerlo personalmente. Aunque creo haber hecho al menos algo bueno por él: cuando estuvo internado en el Hospital Italiano fui a donarle sangre. Tal vez no sea algo groso, pero intenté devolverle de algún modo todo lo que él me brindó a mí a través de sus obras.
¿Según tu parecer, los autores de historietas colaboran entre sí o son individuos aislados?
Respecto a la producción artística, para mí hay como dos grupos: por un lado, autores con largas trayectorias en el medio que tienen mucho de ‘lobo solitario’ y, por el otro, autores jóvenes que son más colaborativos y encaran proyectos en conjunto, como Híbrido Fanzine o la publicación Panxarama. Lo bueno es que esas diferencias se diluyen –la gran mayoría de las veces– a la hora de organizar eventos o convenciones, momentos en los cuales se generan ámbitos lindos de intercambio.
¿Qué opinas de los ilustradores?
Son personas con un talento extraordinario que, muchas veces, pasa desapercibido… por ejemplo: vas a X librería, compras un libro, el arte de tapa es espectacular, sin embargo el nombre del ilustrador figura casi al pasar junto con los créditos por copyright o en la solapa de la contratapa. No obstante, a pesar de ese ‘desdén’ editorial al momento de reconocer la obra de estos artistas, en el ámbito local hay un montón de ilustradores excelentes.
Mi favorito sigue siendo Alberto De Piero, que ilustraba en la revista Billiken a principios de la década del ’90, en ese entonces veía sus dibujos (tenía 6 o 7 años) y francamente me encantaban (de hecho, hace poco pude rescatar una parte de mi vieja colección de revistas y volver a hojear esas páginas fue como un auténtico viaje en el tiempo).
¿Es importante la divulgación de las novedades sobre historietas?
¡Por supuesto!, sino no podría enterarme dónde estará Jorge Lucas firmando tomos de Cazador, ja ja.
Está bueno poder conocer las distintas publicaciones que van surgiendo, las obras de los nuevos autores, enterarte de los distintos eventos… en ese sentido Facebook y las redes sociales en general ayudan muchísimo.
¿Qué opinas de la autoedición?
Me parece una buena opción como alternativa a los circuitos tradicionales de edición y distribución, mucho más dinámica y que permite al autor tener pleno control de todo el proceso artístico/productivo.
¿Te animas a opinar sobre algún editor?
¿Para bien o para mal? Porque así como hay editores y/o editoriales con lindos ritmos de publicación y un variado repertorio de autores editados (Domus Editora, por citar un caso), hay otros que van para atrás… alcanza con ver el desastre que hizo Deux Books con la edición del tomo nº 7 de la Biblioteka Cazador.
Hablando de esto ¿Qué opinas del Proyecto de Ley para incentivar la producción de la Historieta en Argentina? http://www.dibujantestrabajando.blogspot.com.ar/p/ley-historieta-nacional.html
Me parece un proyecto sumamente interesante desde el aspecto de la producción y distribución, aunque ese es solo la mitad del problema. Si no se generan e incentivan pautas sociales de consumo, si no se populariza el género en todos los ámbitos (más allá del educativo y/o pedagógico, tal como se propone en el Artículo 5), entonces nos encontraríamos ante un incremento de la oferta sin una demanda correlativa o, peor aún, una oferta que genere bajo o nulo interés por parte del público.
¿Y qué pensas sobre la ADA, la Asociación de Dibujantes de la Argentina, que ahora quiere abrirse a recibir a todas las categorías de dibujantes en busca de formar un gremio y conseguir una ley para jubilación a los dibujantes?
Estuve leyendo su Estatuto Social y lo que mencionas, agremiación y ley de jubilación, me parecen iniciativas excelentes para los miembros de este oficio. Que puedan gozar de las mismas garantías laborales que cualquier trabajador en relación de dependencia o profesional monotributista.
¿Ves televisión?
Lo poco y estrictamente necesario: el pronóstico del tiempo y el resumen de la fecha, pero nomás cuando gana Racing. O sea, al final termino viendo sólo el pronóstico del tiempo… [En el ínterin salimos campeones. Eso no es poca cosa.]
¿Qué opinas sobre los adelantos tecnológicos en la vida diaria?
Según el contexto pueden ser sumamente positivos o desastrosos. Por ejemplo, está bueno tener un celular que te permita hablar, escribir y contactarte en tiempo real; pero ese mismo celular en manos de un adolescente, en el contexto de un aula, sonando a todo volumen, mientras vos queres explicar en qué consiste la Revolución Industrial… y, sí, ¡te saca de las casillas!
¿Qué pensas de las nuevas formas de comunicación? ¿Y las redes sociales?
Usadas con mesura son excelentes, sino se convierten en ventanas indiscretas que terminan exacerbando los ánimos: para eso alcanza con ver la cantidad de discusiones inútiles que se generan por Facebook o Twitter. O el caso de mi amiga M***** que cerró su perfil porque el novio se ponía celoso y viceversa… pareciera que la hipercomunicación virtual es nociva para la salud. [Ahora M***** tiene un novio macanudo e hincha de Racing. Tal vez sea por eso que reabrió su cuenta de Facebook.]
Ahora los chicos siguen aventuras a través de juegos de video o historias en cine condicionadas por el merchandising ¿Pensas que eso remplazará a la literatura tradicional?
No creo, sobre todo porque muchas veces esas mismas aventuras generan algún tipo de literatura ‘tradicional’ o, como suele suceder, se nutren de ella. Te doy un ejemplo: el videojuego de Resident Evil, además de la película Resident Evil Degeneration, derivó en un par de novelas escritas por S. D. Perry… tal vez se trate de una mercantilización de la literatura, pero no deja de ser una opción viable.
¿Por qué pensas que, en la opinión general, la Historieta es tan infravalorada?
(Acá es cuando asoma el costado docente intransigente y te respondo…) porque, lamentablemente, la lectura no es un hábito desarrollado en la sociedad argentina. Aunque parezca exagerado lo que acabo de decir, con los años noté que el común de la gente casi no lee libros: leen el diario, en el mejor de los casos leen best sellers, leen prospectos médicos o el recibo de sueldo… pero ¿en cuántas casas encontras una biblioteca constituida como tal? Obviamente esto no es una regla general, pero te da una pauta de los consumos culturales y como eso podría repercutir en la lectura de historietas. Porque de ser así, ¿cómo se puede pretender entonces que el común de la gente las lea? Sobre todo cuando hay ciertos prejuicios en torno al género: los adultos que afirman “las historietas son cosas para chicos”, un montón de pibes que dicen “el que lee historietas es un nerd” y tantas pavadas que vas escuchando a lo largo de los años, pavadas que –lamentablemente– van condicionando el acercamiento del público a las historietas…
¿Imaginas que algún día conquistaremos el espacio como en Star Trek?
¿Alguna vez comiste un alfajor Capitán del Espacio? Bueno, eso es la conquista espacial en todo su esplendor…
Ja, ja. Si hubiese un holocausto climático o ecológico ¿Qué harías?
Depende de qué tipo de holocausto estemos imaginando: un mundo cubierto de agua como en Waterworld sería un embole total; el mundo post apocalíptico de Final Fantasy VII Advent Children está más copado, siempre y cuando no lleves el estigma en la piel; en lo personal me inclino por la actitud de Kaji Ryouji en Evangelion: plantaría sandías en el patio de mi casa…
¿Cuál es tu película de historietas o cómics favorita?
Persépolis, basada en el cómic homónimo de Marjane Satrapi. [Igual me reí muchísimo con Guardianes de la Galaxia.]
¿Crees que los autores de historieta son nerds o ratones de biblioteca despegados de la realidad?
No sé si despegados de la realidad, tal vez viven en una realidad paralela… o en una dimensión paralela.
¿Cuál fue la última historieta que leíste?
Cero Buenos Aires, de Carlos Albiac y Walther Taborda. [Caín, de Eduardo Risso y Ricardo Barreiro.]
¿Pensas que alguien leerá este diálogo?
Si le doy una copia impresa, estoy segura que mi viejo lo leería y lo comentaría orgulloso a sus compañeros de trabajo… [Ahora está felizmente jubilado, pero no por eso dejó de ser un excelente divulgador...]